Santo Domingo, 22 jul.- El Gobierno dominicano mantiene la precaución ante la sospecha de que existen casos de ántrax en Haití, aunque sin confirmación diagnóstica, y tomará las medidas oportunas en caso de ser necesario, afirmó este lunes el presidente Luis Abinader.
Ante la situación de crisis que vive Haití, que apenas cuenta con datos estadísticos y la atención sanitaria es casi inexistente, «nosotros tenemos que ser muy precavidos», dijo en su rueda de prensa semanal el mandatario dominicano, quien añadió: «estamos actuando para prevenir».
La Organización Mundial de la Salud (OMS) todavía no ha confirmado ese dato, pero el Gobierno, insistió Abinader, «está tomando las precauciones de lugar para prevenir (…), nosotros tenemos que cuidar la salud de nuestro pueblo y estamos dándole seguimiento minuto a minuto».
AUTORIDADES COORDINA ACCIONES
En este sentido, indicó que hay una comisión interministerial ya formada que coordina el Ministro de Salud y, «en la medida en que sea necesario, nosotros vamos a tomar cartas en el asunto», aseguró.
Recordó, además, que entidades como la Dirección Nacional de Inteligencia y el J2, organismo de inteligencia del Ministerio de Defensa, están dando seguimiento a todos los temas de Haití, no solamente a los asuntos de seguridad.
Salud Pública dominicana ya anunció hoy que, en coordinación con Defensa, activó los protocolos de seguridad fronteriza para prevenir «cualquier posible propagación de la enfermedad», aplicando controles sanitarios estrictos y vigilancia epidemiológica intensificada en la frontera, de acuerdo con una nota.
COORDINAN ACCIONES CON OPS
El Ministerio está en comunicación «constante» con organismos internacionales como la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) en Haití, que afirman que hasta la fecha no hay casos confirmados de esta enfermedad infecciosa en la región y que las sospechas actuales se basan únicamente en evaluaciones clínicas preliminares.
La bacteria del ántrax, que fue usada en el pasado como arma biológica, puede ser letal y afecta tanto a seres humanos como al ganado.
Esta zoonosis puede transmitirse a los seres humanos por las vías respiratorias, a través de la carne infectada y por las heridas de la piel, pero no se contagia de persona a persona.