En el último año, varios cantantes de renombre han enfrentado una amenaza creciente y preocupante en sus carreras: los ataques de fanáticos durante sus actuaciones en vivo. Lo que solía ser una tradición inofensiva de arrojar flores, peluches y pequeños tesoros personales al escenario se ha transformado en una tendencia peligrosa, con fanáticos lanzando objetos amenazantes, como botellas y calzados, hacia los artistas.
Entre los artistas afectados en los últimos tiempos se encuentran Ahahí, Maluma, Kelsea Ballerini, Anuel AA y Cardi B, por mencionar solo algunos. Sin embargo, esta preocupante tendencia no es nueva, y otros músicos, como Rosalía, Rauw Alejandro, Bebe Rexha, Ava Max, Silvestre Dangond, Harry Styles, Marc Anthony, David Bowie, Don Omar y Karol G, han sido víctimas en el pasado.
Uno de los incidentes más recientes involucró a Anahí, quien recibió un golpe en la cara por parte de un objeto lanzado por un fanático durante una presentación junto a sus compañeros de RBD en Chicago. Aunque afortunadamente no resultó gravemente herida, la indignación en línea fue palpable, ya que los cibernautas expresaron su preocupación por los peligros de tales acciones.
Por otro lado, Maluma también estuvo a punto de sufrir un accidente cuando un fanático arrojó una muleta hacia el escenario durante una actuación. Gracias a sus reflejos, el cantante logró esquivar el objeto y evitar lesiones, incluso convirtiendo la situación incómoda en un momento humorístico al improvisar algunos movimientos con la muleta antes de devolverla al público.
La rapera Cardi B también tuvo un enfrentamiento con un fanático cuando este le arrojó líquido durante un concierto en Las Vegas. La rapera respondió lanzando su micrófono hacia la espectadora, lo que generó amenazas de demandas en su contra.
Los artistas parecen estar cada vez más expuestos a recibir objetos extraños durante sus actuaciones. Incluso la cantante Pink se encontró con una bolsa plástica llena de cenizas humanas arrojada al escenario en junio de 2023.
Ante esta creciente amenaza, la cantante Adele advirtió a su público durante un concierto en Las Vegas, instando a los asistentes a respetar la etiqueta del espectáculo y detener estos actos peligrosos. En tono de broma, disparó una "pistola" de ropa hacia la multitud como advertencia.
Sin embargo, el incidente más grave se produjo cuando la cantante de country Kelsea Ballerini fue golpeada en la cara por un brazalete arrojado por un fanático durante un espectáculo en Idaho. Aunque continuó actuando, la interrupción dejó en claro la gravedad de la situación.
Estos incidentes han puesto de manifiesto la necesidad de abordar la seguridad de los artistas en el escenario y promover un ambiente de respeto y admiración en lugar de acciones peligrosas. Los artistas y sus equipos de seguridad están tomando medidas para garantizar la seguridad de todos los involucrados en sus presentaciones en vivo.
