Washington D.C. – En un emotivo discurso ante líderes de la comunidad judía en Estados Unidos, el presidente Joe Biden expresó su profundo repudio por los actos de crueldad perpetrados por el grupo islamista palestino Hamás en su reciente ataque a Israel. Biden calificó los hechos como "pura crueldad" y condenó enérgicamente la decapitación de niños por parte de terroristas, una atrocidad que ha conmocionado al mundo entero.
"Nunca pensé que vería y tendría confirmadas imágenes de terroristas decapitando a niños", declaró el presidente estadounidense, desmintiendo categóricamente la postura de Hamás, que negó haber cometido tales actos. Hamás tachó las acusaciones de "inventadas" y aseguró que no atacó a civiles durante su ofensiva en respuesta a las "acusaciones inventadas" de Israel sobre masacres en kibutzs.
Las declaraciones de Hamás llegaron después de que el Ejército israelí denunciara la brutal masacre de "mujeres, niños, bebés y ancianos" a manos de los milicianos, comparando sus métodos con los del Estado Islámico.
"No se trata de venganza, sino de decencia", enfatizó Biden, quien señaló que la ofensiva de Hamás fue un acto de "crueldad simplemente odiosa" contra el pueblo judío, calificándolo como el día más mortal para los judíos desde el Holocausto.
El presidente de Estados Unidos reiteró el apoyo continuo de su país a Israel y anunció medidas adicionales para evitar una escalada del conflicto. En este sentido, se informó que Estados Unidos ha desplegado el portaaviones Gerald R. Ford y un grupo de destructores de la Armada estadounidense en el Mediterráneo Oriental, con planes de enviar un segundo portaaviones en los próximos días.
"Las guerras tienen reglas, y creo que Israel está haciendo todo lo que está en su poder para mantener el país unido", afirmó Biden. Además, se comprometió a hacer todo lo posible para garantizar la seguridad de los ciudadanos estadounidenses en peligro, destacando que al menos 22 estadounidenses perdieron la vida en el ataque de Hamás y que aún se desconoce el número de nacionales de EE.UU. llevados como rehenes a Gaza.
Biden hizo hincapié en la importancia de no quedarse en silencio ante atrocidades como las ocurridas en Israel y expresó su confianza en que existe una oportunidad para poner fin a la violencia y prevenir futuros conflictos. "Estamos trabajando de cerca con nuestros socios en Israel y alrededor del mundo. Mi compromiso con la seguridad de Israel y con la seguridad de la población judía es inquebrantable", subrayó el presidente, añadiendo que Estados Unidos ha enviado expertos al país para ayudar en la recuperación de rehenes.